miércoles, 12 de febrero de 2014

de mayor sere...



No se me dan bien las relaciones de pareja. Es un hecho. Me pongo nervioso. Me puede el ansia. El querer. ¡Relájate! me digo. No tienes porqué dominar todos los palos, me repito. Hoy en dia la información es abrumadora. Puedes simplificarla leyendo prensa gratuita, pero ahí está. Y me digo: especialízate. ¿Porqué dominar todas las combinaciones de las relaciones humanas? No tiene sentido. Prioriza. Acota. Define. No soy un hombre del renacimiento. 


Apostato del todo. Yo, pequeño . Posicionado. Me especializo en amante. Bonita palabra. Mejor amante que niño yuntero. Y en ese terreno me defiendo. Con todas mis contradiciones. ¿Has intentado disfrutar de tus contradiciones? Es un ejecicio interesante. No me atrevo a decir instructivo. Definitivamente, no me atrevo. El problema es el complejo de Peter. Te dirán, con suerte, que eres un buen amante. Ya intuyes que te pinden un siguiente paso. Un nivel completado. Una puerta a una plenitud de la parte. Ahí es cuando has de decir: “¿Yo? Qué va, qué va, que va.... pero cómo se te va, tía. Te has dejado llevar. Yo, de cinco justito. Y me gusta suspender para poder repetir en septiembre...que tengo mucho que aprender. Yo, voluntad. Eso sí, pero no todo es querer, eh. De la convicción con que lo digas dependerán tu futuro y que puedas repetir en septiembre. Esa dulce y humeda reválida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario